La primera fase de entrenamiento, que usualmente se realiza en Coveñas, Sucre, tuvo lugar en la alma mater de la Oficialidad Naval colombiana como parte de las medidas asumidas por la Armada de Colombia a causa de la pandemia por la COVID-19. 

Luego de tres meses de entrenamiento, y durante una soleada mañana en la ciudad de Cartagena, 50 Infantes de Marina Bachilleres, del segundo contingente de 2020, recibieron las armas con las que defenderán a la Patria y juraron fidelidad a la bandera colombiana, en ceremonia militar presidida por el Capitán de Navío John Henry Ruiz Murcia, Director encargado de la Escuela Naval de Cadetes “Almirante Padilla”.

Durante la primera fase de instrucción y entrenamiento, y soportados en el cumplimiento de los principios y valores institucionales, los jóvenes fueron capacitados en normatividad institucional, derechos humanos, derecho internacional humanitario; desarrollaron habilidades de entrenamiento físico, tiro, supervivencia de combate en el agua, artes marciales; entre otras temáticas de gran relevancia para el desarrollo de su servicio militar en la Armada de Colombia.

El Capitán de Navío John Henry Ruiz Murcia resaltó la importancia de la familia y la decisión de servir de cada joven. “Todos ustedes me dieron las gracias cuando recibieron el fusil. Las gracias se las debo dar yo a ustedes en nombre de la Armada de Colombia y en nombre de nuestra Nación (…) porque empiezan a prestarle un servicio a su Patria (…) Hoy se convierten en orgullosos Infantes de Marina” expresó.

Los Infantes de Marina Bachilleres adelantarán su servicio militar en la Compañía de Seguridad de la Escuela Naval de Cadetes durante un año, poniendo en práctica todos los conocimientos y habilidades adquiridas en esta primera etapa. “A partir de hoy su vida cambia. Su decisión es servir a la Patria y para eso han sido entrenados” puntualizó el director encargado.

La Escuela Naval de Cadetes, como escuela de formación de la Armada de Colombia, reafirma su compromiso con la formación integral de hombres y mujeres, ciudadanos ejemplares, comprometidos con el país y proteger el azul de la bandera.